¿Quién fué el primero en tener la mala idea de poner nata a la carbonara? ¿Por qué? ¿Para darle cremosidad? El huevo y el queso ya se la dan…
A mi me encanta la cremosidad que le aporta la yema de huevo a la pasta, es la mejor salsa del mundo y no se le tiene que hacer nada. Sólo ponerla sobre la pasta caliente y mezclar…
Ideas!
Si no encontráis guanciale lo podéis sustituir por panceta ibérica.
Es muy importante que las yemas de huevo las añadís fuera del fuego, si no se os van a cuajar y no quedará cremosa la salsa.
Ingredientes
320g de la pasta que más os guste
100g de guanciale
6 yemas de huevo (una por persona más una cada dos raciones)
Parmesano (mejor si es una cuña y lo rallamos al momento)
Sal, pimienta y agua
Vamos a ello!
Ponemos la pasta a hervir en abundante agua con sal. La retiramos dos minutos antes de que esté al dente.
En una sartén a fuego medio ponemos el guanciale cortado y dejamos que pierda la grasa. Retiramos el exceso de grasa.
En la sartén añadimos un cucharón del agua de cocción de la pasta y rallamos bastante queso parmesano. Cuando empiece a fundirse el queso añadimos la pasta y dejamos que termine de cocerse.
En un bol ponemos dos yemas, un poco de sal y pimienta negra. Añadimos la pasta y lo mezclamos bién hasta que las yemas de huevo se hayan integrado bién.
Servimos la p